6 microhábitos que reconfiguran tu cerebro y mejoran tu salud ¡Prevenir enfermedades es posible!
Descubre 6 hábitos que podrían estar dañando tu salud. Aprende a revertirlos y transforma tu vida hoy mismo.
Los pequeños hábitos diarios, reforzados con el tiempo, literalmente reconfiguran tu cerebro en días. La ciencia ha demostrado la presencia de microhábitos que conducen a efectos medibles después de solo una semana. No es necesario hacer nada drástico o pasar de un extremo a otro en el transcurso de unas pocas semanas para mejorar su salud.
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Mejorar tu calidad de vida no implica de repente caminar 10,000 pasos al día. Se trata de pequeños actos que toman minutos, y puede generar un cambio positivo en tu cerebro.
¿Qué es un microhábito?
Un microhábito es una acción menor que contribuye al bienestar y al cuidado personal. Sostenidos, junto con otros hábitos saludables , estos comportamientos pueden sumarse. Pero la psicóloga Laura Palomares, directora de Avance Psicólogos, advierte que ahora hay una demanda abusiva de autocuidado y, que lejos de ser saludable, puede convertirse en una carga cotidiana. Por lo tanto, sugiere seleccionar solo los microhábitos que realmente necesitas, sin pedirte demasiado ni sentirte abrumado.
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¿Existen pequeñas actividades en tu vida diaria que pueden estar saboteando lentamente tu salud a largo plazo?
Los principales profesores de Harvard y otras instituciones médicas reconocidas han identificado seis hábitos aparentemente inofensivos que bien podrían estar acortando tu vida. Estos hábitos silenciosos, pueden hacer maravillas por nuestra salud y felicidad. La buena noticia es que hay métodos sencillos para contrarrestar sus efectos una vez que se reconocen, para promover un envejecimiento saludable.
- Autocrítica negativa: Esa voz cruel que tenemos en nuestra cabeza puede influir en nuestro estado de ánimo, crear creencias limitantes y hacernos susceptibles a la ansiedad o la depresión. Este tipo de pensamiento también puede ponernos en el camino hacia hábitos poco saludables, como llevar una vida sedentaria o comer mal. La respuesta es practicar la autocompasión y reemplazar los pensamientos negativos sobre uno mismo por algo mejor.
- Doom-scrolling en pantallas : Pasar compulsivamente noticias negativas de las redes sociales extiende nuestro estado de vigilancia, amplifica el estrés y puede reducir el sueño y la concentración. Reduzca el tiempo frente a la pantalla y realice actividades relajantes como caminar o escuchar música ayuda a desarmarlo.
- Preocupación crónica: La preocupación crónica puede ir acompañada de dolores de cabeza, insomnio y problemas digestivos. Dirigir la energía a cosas que podemos controlar y hacer ejercicio con frecuencia aliviará el estrés.
- Aislamiento: Cuando dejas de comunicarte corres el riesgo de sentirte solo y aislado, lo que puede resultar en múltiples enfermedades cardíacas y deterioro mental. Las conexiones sociales se refuerzan cuando las personas participan en actividades grupales .
- No usar hilo dental: Las bacterias acumuladas por saltarse el uso diario del hilo dental pueden llevar a la enfermedad periodontal, que está asociada con la diabetes, la neumonía y los ataques cardíacos. Una buena higiene bucal es esencial para evitar las complicaciones.
- Respiración bucal: Afecta la función natural de la nariz de filtrar nuestra respiración y la oxigenación del cuerpo, lo que lleva a un sueño interrumpido y al riesgo de desarrollar hipertensión.
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Reconocer estos hábitos que hacemos casi automáticamente sin siquiera pensarlo es el primer paso para tomar el control de nuestra salud. Si tan solo podemos ser más conscientes de nuestros hábitos y usar estrategias que sean buenas para nosotros para mejorar y alargar nuestras vidas .
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